Welcome to Australia" decía Scott mientras el que escribe luchaba por mantenerse erguido. "Putos australianos" le respondía balbuceando. No se le ocurrió mejor idea que, para celebrar mi llegada, acudir con sus amigotes del equipo de baloncesto a un "pub crawl". ¿Qué es un Pub crawl? Pues básicamente consiste en organizar un itinerario por el centro de Melbourne formado por unos 15 pubs, en los cuales cada componente de la etílica excursión ha de beberse una pinta de cerveza, además en cada pub se han de realizar unas pruebas del estilo; No sujetar el vaso con la mano derecha, hablar sólo con locales, hablar solo con personas de diferente sexo, hacer una carrera de cervezas etc...que si no cumples acarrean pena de beberte la pinta a trago. Y por si no fuera poco entre los miembros circulan 3 bolitas de goma que si te las cuelan en tu pinta...Si hidalgo, hidalgo...hijoputa el que deje algo. Parecía divertido el asunto, pero me empezaron a temblar las piernas cuando en el primer pub el más canijo de los aussies (al menos una cabeza superior a mi) recibió dos canastas consecutivas y en consecuencia se bajó dos pintas de trago. Madre mia! esto va en serio. Pese a la clara inferioridad de tamaño y la dificultad de comunicación después del quinto pub, aguanté con gran pundonor hasta bien entrada la madrugada. La verdad es que lo pasamos en grande, al estilo australiano, sin recordar mucho al dia siguiente y terminando la juerga en el jardín de Scott, al amanecer tocando canciones de Angus & Julia o Radiohead, como en Holanda, como en Madrid, como siempre.
Respecto al resto del viaje...Increíble, no creo que sepa transmitir tanto escribiendo, sin gesticular. Nunca fui un literato. Australia es un país acojedor, de gente sencilla, amable, habladora, gente que disfruta con la naturaleza y construyendo cosas con sus manos. El entorno es precioso, prados verdes al borde del océano, bosques de árboles de 60 metros, koalas, canguros, wombats...
La Navidad la celebramos en casa de los padres de Scott, aunos 25 km de Melbourne, en el campo, con sus hermanos, su primo y su novia. No recuerdo comer tanto en mucho tiempo, hasta rebosar. Y por supuesto bien regado con cerveza australiana. Una Navidad muy diferente, extraña, calurosa, en inglés, sin la familia ni los amigos. No daba la sensación de ser Navidad, podía haber sido un dia cualquiera, lo que, quizá, lo hizo mucho más fácil. Evidentemente la noche la acabamos en casa de Scott haciendo una jam session , cambiando los villancicos por Hootie & the blow fish.
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2 comentarios:
PABLI!!!!!!
Q BONITO DE VERDAD!!! ENVIDIA!! PERO SANA EH???? Q BIEN Q ESTES DISFRUTANDO TANTO!!!! SIGUE ASI!!! SE MUY MUY FELIZ Y ANIMO!!!!!
NOSOTROS TE QUEREMOS MUCHIIIISIMO Y ESTO YA SABES QUE NOES IGUAL SIN TI.
BESITOS
pero que bien te lo pasas!, no?
que envidia!
disfuta!
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